Afrontamos el tecer día animados con la gesta del día anterior, sobre el papel culminar la ruta no parecía tener dificultad excesiva tras lo ya andado... Craso error...
No madrugamos demasiado porque sólo nos restaban 70km y el barco salía a las 18:30 y no queríamos estar mucho tiempo tirado en Morrojable, otro craso error...
Antes de ponernos en marcha nos encontramos con dos ruedas desinfladas que también demoro algo la salida...
Comenzamos la ruta sobre las ocho de la mañana siguiendo como hasta el momento el trazado de Fudenas, todo empieza genial como venía siendo y vamos disfrutando de pistas muy guapas y buen tiempo.
Durante el camino atravesamos algunos pueblos costeros y nos encontramos con una caravana muy peculiar...
La primera parada "larga" la hacemos en La Lajita donde cogemos resuello para continuar, vemos que aún falta mucho para llegar y la presión de tener que llegar antes de una hora empieza a generar algo de nerviosismo... Seguimos avanzando por la ruta por donde transcurre el Fudenas, el agua se va agotando, el cansancio empieza a pasar factura, los víveres escasean y unas tristes magdalenas, de fresa, desencadenan un drama... Pero lo peor esta por llegar... a partir del Km 28 se empieza a meter un viento tirando a huracanado que empieza a dificultar la travesía enormemente, hasta tal punto que sobre el km 31 tuvimos que tomar una decisión que acabo con la ruta tal y como la teníamos planeada.
Era tal el viento que era imposible pedalear, incluso costaba caminar junto a la bicicleta, había que agarrarla fuertemente para que no se la llevara el viento... por momentos la bicicleta se levantaba del suelo haciendo amagos de echarse a volar como la soltaras... Debido a ello tomamos la decisión de abandonar el trazado del Fudenas para tomar la carretera principal que estaba cerca pensando que sería más llevadero el camino y el viento molestaría menos... otro craso error...
Empezamos a ir por la carretera medio bien, tenía algo de arcén y aunque el viento molestaba muchísimo se podía tirar aunque sufriendo bastante... poco más adelante se acabo el arcén y el viento racheado convirtió el tema en algo peligroso ya que íbamos dando tumbos por una carretera sin arcén y con los coches pasando a todo trapo... Hubo un momento en el que, viendo el peligro que corríamos, yo propuse coger la guagua hasta Morrojable ya que nos topamos con una parada en el camino. La propuesta no fue bien acogida y seguimos dando tumbos por la carretera...
Más adelante, cerca de Morrojable, la carretera se convirtió en autovía. Mejor por un lado porque tenía arcén pero peor por otro porque si nos trincaban en bici por ahí nos metían un paquete... Por ese entonces propuse salirnos de la carretera y retomar el trazado original del Fudenas para evitar posibles problemas, pero los ánimos estaban muy tocados y la gente quería llegar lo antes posible de manera que mi propuesta fue desestimada, una vez más...
Tras un buen tramos de autovía en el que afortunadamente no paso nada llegamos al fin a Morrojable... compramos víveres en un supermercado de un centro comercial y recuperamos energía para subir directamente hasta el muelle. Nos equivocamos de salida camino al muelle y tuvimos que callejear un rato para regresar a la ruta correcta. Llegamos finalmente al muelle pasadas la cuatro de la tarde, exhaustos física y mentalmente por todo lo acontecido... un final que chafo la aventura a última hora, el dios Eolo nos hizo una jugarreta...
Finalmente el recorrido que hicimos fue este, más corto que el previsto pero quizás incluso más jodido...
No obstante una vez en casa y haciendo balance creo que las dos primeras etapas fueron tan buenas que puede correrse un tupido velo con lo sucedido en el último día....
Ahora queda ver si nos animamos a repetir y hacer el Fudenas como dios manda...